Entrarás a la universidad y emprenderás un camino muy diferente al que dejas atrás con tu experiencia del bachillerato.

Además debes asegurarte del presupuesto con el que cuentas, investiga y coteja precios para elegir el que se adapte a tu bolsillo.

Si se trata de un pupilaje valora todos los servicios que se te ofrecen, el uso de computadoras, alimentación, limpieza de ropa y tu propio espacio para estudiar y hacer las tareas.

Visita los lugares, inspecciona las estancias de la casas, eso te dará una idea sobre las facilidades que tendrás y podrás valorar si el costo vale la pena.

Aunque los propietarios serán quienes te cuestionen, tu debes preguntar sin cesar. También tienes que conocer sus hábitos, costumbres y las reglas del hogar, así evitarás futuros inconvenientes.

Es mejor que te decidas por una casa familiar, ya que eso te asegura un ambiente más acogedor.

Puedes valerte de la información que te brinden tus amigos y conocidos que han pasado por la misma experiencia de la mudanza temporal o puedes echar mano de instituciones de bienes raíces que se encargan de hacer este tipo de servicios por tí.

Tanto tú como tus padres deben estar consientes que el lugar que sustituirá tu hogar debe ser cómodo, pero sobre todo seguro.

A lo mejor estarás muy ocupado estudiando la carrera que elegiste, pero sin importar cual sea, debes tomar en cuenta el formarte en tres áreas que te servirán de mucho para tu desarrollo profesional estas son: el manejo de idiomas como el inglés, aunque hay otros que están cobrando importancia como el mandarín por ejemplo.

Además puedes optar por el manejo de programas informáticos o de diseño gráfico, esa habilidad le dará un extra a tu preparación académica.

Aunque pienses entregarte de lleno en tu educación superior puedes darte chance para optar por cursos sabatinos por ejemplo.

En la actualidad la mayoría de instituciones de educación superior ofrecen cursos dentro de su mismo campus, lo que te facilita la movilidad y reduce los costos.